En el anterior post te dimos una serie consejos sobre la limpieza intensiva de verano para preparar tu casa en esta estación. Y uno de esos puntos era que hay que quitar las alfombras, puesto que dan calor y es una buen momento para aprovechar a lavarlas.
Recuerda que también te dábamos dos pequeños trucos:
- Aspirarlas frecuentemente durante el resto del año.
- Tras su lavado, no dejarlas secar al sol.
En el momento que vayas a hacerlo sigue los pasos de: aspirar, sacudir y volver a aspirar. Y una vez realizado este previo, ten en cuenta el material del que esté fabricado tu alfombra, ya que de ello dependerá su limpieza. Por ejemplo:
- Si es de algodón, y siempre que el fabricante lo recomiende, lávala con un programa de prendas delicadas;
- si es sintética, con aspirarla debería ser suficiente. Si tiene manchas que se te resisten, prueba con una espuma en seco.
Si lo que te gustan son los materiales más atípicos:
- Como el bambú: aspira y pasa un paño humedecido y bien escurrido;
- el yute: añade en el agua una pizca de sal y pasa un paño o esponja;
- o el cáñamo: lo mejor es lavarla a mano.
¿Cómo has de guardarla?
Tras dejarla secar estirada, has de guardarla y desde Genser te recomendamos que uses plásticos grandes y así mantenerla lejos de la humedad, además de ubicarla en un lugar amplio donde no se aplaste. Si no cuentas con dicho espacio puedes optar por colocarla debajo de la cama.
Y como siempre te recordamos, la mejor opción para conseguir una limpieza impoluta es confiar en una empresa especializada. Ya que cuentas con ellos para esta tarea, ¿por qué no confiarles alguna más?